En esa época el INCORA abrió la puerta a la colonización dirigida y a los cambios en el uso del suelo para el cultivo de palma.
Eso empezó a mediados de los 60, cuando llegaron madereros de Bogotá, Villavicencio, Antioquia, Norte de Santander, Córdoba. No traían ni licencias ambientales del INDERENA, que era la autoridad ambiental en el 68. Los barcos que antes llevaban productos agrícolas a Buenaventura, ahora transportaban principalmente madera.
En los años 30, llegaron de Antioquia unos mineros paisas que después de atravesar los farallones del Citará buscaron una mina descubierta por el indígena embera Severo Campo. Eso en el río Colorado. En principio fueron unos blancos de apellido Chalarcá, pero a medida que ocuparon la zona y legalizaron la mina, cambió de sociedad en sociedad, hasta que fue a parar a las manos de Guillermo Montoya, Ricardo Escobar y sus otros socios en 1927
Contenido cualificado que amplía la temática.
Lo que cuenta el periodismo de la evangelización en esta región
Desde los 60, territorios ancestrales de comunidades chocoanas y vallecaucanas fueron tratados como baldíos y por tanto adquiridos o despojados por colonos. Pueblos indígenas y afros fueron así relegados a la marginalidad en sus propias tierras. Ir al capítulo
En los 70 y 80, desde Juradó hasta Tumaco, Farc, ELN y M-19 incursionaron a lo largo del Pacífico. Al comienzo los campesinos los vieron como un apoyo a sus luchas, pero luego con desconfianza. A Nariño llegó el Cartel de Cali con sus pistoleros. Ir al capítulo
En los 80 y 90, para defender mejor los ríos y los bosques de sus territorios, los pueblos afros crearon organizaciones gracias a las cuales lograron la titulación colectiva de predios y, en 1993, la promulgación de la Ley de las Comunidades Negras. Ir al capítulo
En los 80 y 90, las Farc se afincaron en todo el Pacífico. Atacaban a organizaciones campesinas y resguardos indígenas que no compartían sus métodos. En Buenaventura, secuestraban y extorsionaban; en el sur de Nariño, impulsaron cultivos de coca. Ir al capítulo
Para contener a las Farc, los paramilitares, apoyados por la fuerza pública, también se extendieron por toda la región con diversos bloques. Pero sus principales víctimas fueron líderes de la comunidad. Su desmovilización no paró esa violencia. Ir al capítulo
El conflicto arreció por causa de todos los actores armados, que invadieron los territorios colectivos. Desapariciones y desplazamientos forzados, violencia sexual, reclutamiento de menores y daño ambiental a los ríos fueron algunas de las secuelas. Ir al capítulo